jueves, 9 de febrero de 2012

Clausuran bar de Tijuana donde trabajaba menor de edad. Su madre, originaria de Culiacán, la buscó durante dos semanas

Por Gabriel Mercado

Culiacán, Sinaloa. "Teresa" dejó Culiacán hace años con sus hermanas buscando una mejor vida en Tijuana, pero nunca imaginó que viviría allá su peor pesadilla.

Hace un mes, su hija, de 15 años, le pidió permiso para trabajar en un lugar llamado Siglo 21, un tianguis, donde se desempeñaría como mesera. Se iba desde la mañana y volvía muy noche, y aunque la señal de algo extraño estaba ahí, "Teresa" no lo notó hasta que un día simplemente su hija no volvió.

Pasaron dos semanas, y ella, junto con su pareja sentimental y el novio de la chica, la buscaron desesperados sin tener pistas de ella.

"Lloraba todas las noches, sin saber qué pensar", relató la madre en entrevista telefónica. Temía lo peor. Secuestrada por algún sujeto o con la idea que de un momento a otro podría aparecer el cadáver de su niña. No respondía el celular y la esperanza se apagaba.

Fue el sábado de la semana pasada cuando el novio recibió una llamada de la quinceañera. Le dijo que estaba bien, trabajando en una zona atestada de bares de esa ciudad, por la calle Revolución.

Los familiares fueron de inmediato; en su desesperación no ubicaban bien el nombre del lugar, hasta que la vieron caminando en la calle, transformada, con falda corta y tacón alto, corriendo a guarecerse en uno de los giros negros al notar su presencia. Era un table dance llamado El Zorro, en la avenida mencionada, entre las calles Primera y Segunda, en la zona centro.

>El enfrentamiento. Quisieron entrar por ella pero los meseros y el gerente les impidieron el paso. La madre, en su desesperación, fue y caminó una cuadra en busca de una patrulla. La menor ya había salido y el gerente, Raúl Sandoval Huerta, de 43 años, al ver a los policía primero dijo que ella le había dicho que era mayor de edad, y después cambió su versión, negando que la tuviera contratada.

El sujeto fue detenido y el negocio clausurado, para luego seguir una larga noche de vueltas entre la delegación policial y el Ministerio Público. Seis horas pasaron en trámites hasta poder acudir, en la mañana, la mamá a ver la situación a la Procuraduría, donde retuvieron a la hija y a Raúl Sandoval.

>Posible caso de trata. De acuerdo con información de los periódicos locales El Mexicano y El Sol de Tijuana, existe la posibilidad de la comisión del delito de trata de personas, así que Alejandro Flores, inspector de la Dirección de Inspección y Verificación del Ayuntamiento, clausuró el inmueble bajo el acta 11325/12 y el caso se turnó a la agencia del Ministerio Público del orden común.

"Teresa" dijo que aunque en el Ministerio Público no le pudo confirmar si su hija fue prostituida en ese sitio, teme que haya sido así.

"Es un table dance, hay hasta travestis, ¿qué más se va a hacer ahí? ¿Qué otra cosa, sino prostitución?", agregó.

Añadió que al parecer fueron amistades las que engancharon a la niña para trabajar ahí, con la promesa de laborar como mesera, al igual que en el otro lugar donde estaba, pero ganaría más.

Las autoridades le recomendaron devolverla a Culiacán, que esté con familiares, lejos de ese ambiente y el peligro.

>Llamado. "Teresa" exhortó a los padres a ser más cuidadosos con su hijas y no darles confianza excesiva.

"Le dimos demasiada confianza; lo que nos decía (creíamos que) eso era. La verdad sí (faltó) ser un poco duros", comentó.

También hizo un llamado a las autoridades a que vigilen más esos sitios y hagan operativos donde revisen si las que trabajan ahí son en realidad mayores de edad, y no se trate de menores que con la ilusión de tener mayores ingresos pierdan su inocencia.


*Esta nota fue publicada en El Debate de Culiacán.

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